10-04-2017
Hasta los once años viví en Canarias...
Aquello parecía Méjico, uno de esos pequeños pueblecitos con casitas encaladas de las películas del oeste. Los canarios no eran muy diferentes de los mejicanos de esos filmes... Solo que sin sombreros de charro y con muchos menos bigotes.. Creo... Aunque por entonces los bigotes se llevaban mucho mas que ahora, eso también es verdad.
Solo veníamos a esta puta ciudad en verano. Y entonces no me parecía tan "puta", claro. Pasábamos las vacaciones aquí, en esta casa, que antes era la de mis yayos. El yayo Pepe y la yaya Angelita...
No os podéis imaginar lo que los echo de menos... Sobretodo a mi yaya...
Te quiero mucho, yaya... Te echo de menos...
Estaba pensando... Miraba las habitaciones... Entonces, en aquel tiempo, estas habitaciones, este piso, eran una suerte de paraíso... Y mis yayos eran los ángeles (nunca mejor dicho) que lo custodiaban hasta mi regreso. Los veranos de los ochenta... Qué os voy a contar... El puto cielo, joder...
Ahora... Ahora estas paredes no son mas que... Una cámara fúnebre... Un panteón. Es irónico...
En fin... Una tontería mas... Otra mas.
Me pregunto si los volveré a ver... Me gustaría volver a ver a mi yaya.
Sus últimos años... Decía que en sus sueños la llamaban, su marido... Sus muertos. Estaba cansada de vivir...
Yo solo sueño con... En fin... Ya sabéis con quienes sueño.
Ojalá soñase con la yaya Angelita... Me estás esperando, abuelita? Te has olvidado de mi? Joder... Qué puta maricona estoy hecho... Llorando como un gilipollas... Escribiendo soplapolladas...
Claro que no te espera nadie, puto subnormal de los cojones.
Esta mierda es lo que hay. Y gracias.
Ya puedes dar las gracias de que esta puta mierda termine y no haya nada mas...
Supongo que si todo te lleva hasta un punto, es porque tenía que ser así...
De todas las infinitas variables posibles... Aquí es donde estamos.
Por algo será...
Joder... Llevo desde ayer con HURT en bucle... No puedo parar de oírla. Una y otra vez. Y otra y otra... Y otra mas...
Pero el tiempo no hace desaparecer los sentimientos... No los verdaderos.
Lo recuerdo TODO.
Sigo aquí, con mi corona de espinas. En mi imperio de polvo... Todavía.
Sigo vivo... por desgracia. Lo se porque duele...
El día que deje de doler, el día que deje de sentir... Será el día que deje de estar vivo.
El día en que descansaré...
Pero sería bonito volver a encontrarme con todos los que quiero...
Y tú y la yaya Angelita ya os conocéis. Y me coméis a besos en la puerta...
Si...
No lo espero, pero sería bonito.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La verdad es algo muy bonito.