Todo eran presagios...

"Alma cautiva y corazón gentil

dignos de esta razón, vuestro avisado

consejo solicito y os saludo

en el nombre de Amor, que es nuestro dueño.

Pasado casi un tercio de las horas

fijadas a la luz de las estrellas,

Amor me visitó súbitamente,

cuya esencia nombrar aún me aterra.

Alegre me sentí al ver en sus manos

mi corazón desnudo, y en sus brazos

a mi dama dormida bajo un lienzo.

Al fin la despertó y del corazón

ardiente, humilde y trémula comía;

luego se la llevó y quedé llorando."

Primer soneto de La Vita Nuova, Dante Alighieri

En muchos momentos tengo la sensación de estar en el Infierno... Como si nada de lo que me rodea y me satura por dentro fuera real, sino algo impuesto por una voluntad desconocida y malévola que disfruta con mi tortura... Quizás en retribución por mis pecados... Si...

"El Infierno es la imposibilidad de la razón" 

Nada de todo esto tiene ningún sentido... Solo la Muerte parece dar alguna esperanza. El fin de todo, el fin de la pena, del dolor... De la desesperanza. Si tiene que haber olvido, que sea el olvido completo. Si tiene que haber vacío, que se vacíe por fin mi ser de todo este... Este Amor que no me deja ni respirar, que me estrangula y me apuñala... 

"¿Sentir diariamente una puñalada de hambre de ella y encontrar su sustento con su sola visión? Creo que sí, ¿pero vería ella tras los barrotes de su empeño y suspiraría por él?"

Ese tiempo ya pasó... Para mi desgracia...

"Dices, Lucifer, que aquí el Sueño no tiene ningún poder, y quizá tengas razón, pero… ¿qué poder tendría el Infierno si los condenados no pudieran soñar con el Cielo?"

La esperanza es la mas sutil y cruel de las torturas del Infierno...



Si estoy en el Infierno.