Me encontraba mal físicamente. Tan mal que sentía que iba a darme un algo, que iba a palmar, literal. Había sufrido un palo anímico bastante fuerte el año anterior...
Pero decidí darme una ÚLTIMA OPORTUNIDAD, la ÚLTIMA.
Entre Marzo y Septiembre perdí 30 kilos. Sin magia, sin secretos. Poca comida y mucho andar con mucho peso a cuestas (además del propio). Conocí a mi mujer, terminé la carrera y me puse a pelear para que tuviéramos una vida, un futuro... Los dos.
2018...
Llevo 882 días sin mi mujer... Eso son dos años, casi dos años y medio...
La última vez que me pesé por curiosidad (malsana) estaba en mas de 120... Soy incapaz de rascarme la espalda con la mano. Como suele decirse, es mas fácil saltarme por encima que darme la vuelta.
Probablemente me falle la patata, eventualmente... Es cuestión de tiempo, digo yo...
No, no me doy mas oportunidades. Estoy cansado... ESTOY CAN-SA-DO.
Por qué mierdas estoy escribiendo esto?
No se... en realidad esto tenía que ser algo positivo, quiero decir... Verás, estaba leyendo algo. Alguien que hablaba sobre lo complicado que es perder peso y tal... Y joder, lo es, yo lo se...
Como dijo la enana, “las guerras se ganan en la voluntad”... Así que la parte buena es que si tienes voluntad (de verdad), perder peso es mas fácil que ganarlo... Bueno, al menos se puede tardar menos tiempo. Es lo que quería decir... Solo eso... Ánimo.
A los que tengáis voluntad, claro...
A mi ya me da igual.
J<3B
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La verdad es algo muy bonito.