No importará que haya perdido lo único que no podía perder bajo ningún concepto, la piedra angular de mi vida, lo que me hacía seguir adelante... La fuente de toda mi felicidad.
No importa que el único deseo que haya quedado en mi es el de morir, el de terminar con toda esta PUTA MIERDA de existencia.
La química puede ocuparse de todo.
Madremía, que tontico que soy, de verdad... Gracias, en serio, gracias por mostrarme lo errado que andaba. Mañana mismo empezaré a doparme hasta que mis neuronas bailen la macarena.
Se va a cagar la perra...
PD: Que te pires
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La verdad es algo muy bonito.